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Detienen a los presuntos culpables de la muerte de Mía Belén

Tres personas fueron detenidas hoy acusadas de ser quienes el mes pasado asaltaron una casa en Banfield y en la persecución policial chocaron la camioneta robada en la que huían contra un remis, generando la muerte de una beba en Wilde.
Se trata de dos varones, uno de ellos menor de edad, y una mujer, quienes fueron apresados luego de tres allanamientos en la localidad bonaerense de Monte Chingolo, según informó la agencia Télam.
El operativo estuvo a cargo de personal de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de Lomas de Zamora, con apoyo de la Jefatura Distrital Lanús. El primer allanamiento fue en una vivienda de Donato Álvarez al 4300, donde se aprehendió a un joven de 19 años y su concubina de de la misma edad, y se logró incautar una pistola calibre 380.
También fue secuestrado en ese domicilio una alianza, seis cadenas de oro y plata, una pulsera, tres relojes, dos teléfonos celulares, una chequera del Banco Comafi, 800 pesos, 100 cajas de medicamentos de laboratorios Raffo y un bolso con palos de golf, todos elementos presuntamente robados.
El segundo allanamiento fue en Chorroarín y Blanco Encalada de la misma localidad, donde se detuvo al menor de edad y se incautó un anillo de oro, dos equipos Nextel y tres pares de anteojos. Y el tercero, fue en Cazón al 500, donde se secuestró una pistola calibre 22 largo sin numeración, por cuya tenencia se aprehendió a un hombre de 58 años que no está vinculado a la causa del robo y el homicidio de la beba.
El hecho ocurrió el 13 de junio pasado por la noche cuando un patrullero de la comisaría de Wilde comenzó a perseguir a una camioneta 4X4 Toyota Hilux que había sido robada momentos antes a una familia en Banfield. En la esquina de Paysandú y Larralde, de Wilde, la 4×4 chocó a un remís Renault Megane en el que viajaban Gabriel Gordillo (39), su esposa René Baiven (34), la beba de dos meses del matrimonio, Mía Belén, y el chofer Rodolfo Real (57). El impacto hizo que el auto se subiera a la vereda y se incrustara contra un comercio que tenía una reja en su frente. Como consecuencia de las dos colisiones, la mujer y la beba que iba en sus brazos pasaron del asiento trasero a la parte delantera del habitáculo. La beba, que al día siguiente cumplía dos meses, quedó gravemente herida con fractura de cráneo y finalmente murió, pese a que fue derivada para su atención al Hospital de Niños Sor María Ludovica de La Plata. Mientras que Gordillo fue el único ocupante del remís que salió prácticamente ileso ya que Baiven y Real quedaron atrapados entre los hierros y tuvieron que ser rescatados por los bomberos. Los delincuentes abandonaron la camioneta robada y escaparon a pie, ya que los dos policías del móvil priorizaron la asistencia a las personas heridas que acababan de accidentarse.

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