El Obispo manifestó que «Dios tiene misericordia de nosotros y siempre escucha atentamente a aquel que dice la verdad, a aquel que es humilde, a aquel que sabe rezar».
Por ese motivo, recomendó pedirle a Dios «tener esa actitud de gratitud, de pedido, y a la vez de reconocimiento».
«Dios nos dio la dignidad de existir como personas, nos dio la dignidad de creyentes, de cristianos en el Pueblo de Dios. Nos dio una misión y un destino: quiere que vayamos, a través de la oración, reconociendo estas dignidades que Dios nos da y que nadie nos puede quitar», dijo Mons. Frassia.
Al recordar la importancia de la humildad en la vida del hombre el prelado señaló que «si eres humilde, dices la verdad; y si dices la verdad, siendo humilde, estás más cerca de Dios, estás más cerca de los hermanos! Si haces lo contrario, te alejas de Dios, te alejas de ti mismo y te alejas de los hermanos».