
«No veo por qué tengo que comerme juicios morales de todos lados si fue un accidente del fútbol. Son cosas que pueden suceder y que pueden o no evitarse. Nunca tuve mala leche y nunca escuché que un jugador pensara `voy y le rompo la pierna` a un rival», sostuvo Camoranesi en diálogo con radio La Red.
«Esto es así: o entrás a la cancha o te quedás tomando mate en tu casa. Cometí un error y lo pago, nada más, y ni siquiera me pongo a pensar si cinco fechas son justas o no -agregó-. Yo pienso que se trata de una contractura que me deja afuera tres semanas».
El volante de Lanús enfatizó: «Me tocó cometer un error, que es parte del fútbol, y lo pago calladito la boca. En la cancha hay que ser tranquilo para evitar este tipo de situaciones, y cuando no tenés esa tranquilidad, te equivocás y pagás».
Y de la reacción inicial de Toranzo, que lo mandó «a un psicólogo», Camoranesi contó: «Cada uno se expresa como le sale o cree necesario. Por suerte somos diferentes. Nadie entra a la cancha con un cuchillo. A mí me pareció correcto no decir nada, aunque, insisto, no sé por qué me tengo que comer estos juicios morales. Son cosas del fútbol, ya pasó»