Por el lado de Quimsa, sumó su décimo segunda caída como visitante.
El `Granate` produjo una remontada tremenda en el último cuarto para revertir un desarrollo que le era muy desfavorable. El local encontró en la entrega, solidaridad y carácter los argumentos para imponerse.
El partido se inició con un local que aparentó tomar las riendas y se puso 4-2 arriba, pero cayó en una «nebulosa» y el visitante selló un pasaje 11-0 para adelantarse 11-4, con 6 minutos en el reloj.
Los santiagueños «lastimaron» con el poderío de su dupla interna, ya que Williams (8) y Lo Grippo (6) se convirtieron en un dolor de cabeza para la defensa de Lanús.
Tras un tiempo muerto de Santander, el Granate mejoró con la rotación del banco y emparejo el trámite, aunque cerró el cuarto perdiendo 17-10.
En el arranque del segundo cuarto Quimsa consiguió la máxima 21-10, pero Lanús reaccionó rápido con ímpetu para lograr un pasaje de 9-2 y colocarse 19-23. El juego se tornó más físico, con mucho roce y dos elencos que lucieron trabados para ejecutar sus movimientos.
La dupla interna suplente del local Giorgi (5) y Guaita (6) le dio más frescura, pero no alcanzó para evitar ir al descanso abajo 28-36.
Tras las charlas en vestuarios, Lanús saltó renovado al campo de juego, exhibió otra actitud y energía, apostando a formaciones alternativas y defensa zonal, y «clavó» un pasaje 9-2 para acercarse 36-38, a los tres minutos.
Empero Quimsa halló respuestas en Pellot Rosa (8), dentro de un estilo de juego «sucio» y pudo mantenerse arriba y clausurar el segmento 53-47.
El último cuarto deparó sorpresas y emociones. El equipo de Santander salió decidido a dejar todo y acudiendo al corazón generó una reacción impresionante.
En los primeros cinco minutos borró a Quimsa con una asfixiante defensa y un contragolpe veloz, con un pasaje de 11-2 y pasó al frente 58-55. Los santiagueños lucieron desconcertados y sólo sus extranjeros estuvieron a la altura de las circunstancias, pero Lanús no le dio espacios y con un gran carácter y un Byró (8) productivo, se quedó con una victoria inesperada por el desarrollo adverso.