En el elenco de la renovada serie estadounidense Dallas, se encuentra la actriz Julie Gonzalo, nacida en Lanús. Esta no es su primera aparición en la escena hollywoodense -hizo películas como La nueva Cenicienta, con Hillary Duff, y actuó en series como Veronica Mars- pero la trascendencia del proyecto puede darle una cuota importante de publicidad en nuestro país.No se trata de una remake, sino de la continuación de la historia de la lucha por el poder relatada en combinación de serie dramática y soap opera, con un protagonista tan inescrupuloso como un Lord Voldemort pero con sombrero tejano. Esos ingredientes de Dallas, la mítica serie que comenzó en 1978 y se retiró de la pantalla en 1991, estarán presentes en la nueva Dallas versión 2012, que estrena hoy por Warner Channel.
En Dallas Julie interpretará a la joven Rebecca. «Rebecca está muy enamorada y tiene muchos secretos y misterios. Pero, en los primeros capítulos, su ambición pasa por sostener su amor por Cristopher, de quien está enamorada y con quien quiere tener una familia», explica Julie en una rueda de prensa.
Dallas regresa con los mismos actores y personajes originales. Así, volverá el villano de villanos J.R. (Larry Hagman), su esposa Sue Ellen (Linda Gray), su hermano Bobby (Patrick Duffy) y su sobrina Lucy Ewing (Charlene Tilton). Pero se suma también una nueva generación, los hijos de esta familia, que parecen haber heredado la misma pasión por el dinero y el poder que sus antecesores.
La serie ya estrenó en EE. UU. y tuvo más de seis millones de espectadores en la emisión del piloto, una cifra alta y prometedora. Aquí, esta noche será el desafío de la serie (una de las más promocionadas por Warner en los últimos tiempos) para ver si seduce a los espectadores de la versión original y si conquista a los nuevos televidentes, cuya gimnasia a la hora de ver televisión los convierte en un público que exige.
Julie cuenta que la serie retoma elementos de aquella de 1980: las intrigas, la lucha por el poder y esos ingredientes que hicieron que la audiencia se mantenga. La novedad está en el ritmo narrativo, más ágil y dinámico. Es que la historia retoma la anterior, como si la familia Ewing hubiera continuado todos estos años con sus disputas y peleas en Texas, sólo que no hubo cámara para registrarlo.
Claro que la actualidad de los temas, sobre todo el presente del negocio petrolero, ha cambiado bastante. Y no es que la serie incluya en su mirada a grandes magnates petroleros de medio oriente, sino que suma nuevos enfoques. «En esta temporada, en los primeros capítulos se toca el tema de la energía alternativa, de la opción verde, lo que en la actualidad del tema energético es importante. Esto es Dallas 2012, no de 1980», añade Julie.