Diez barrabravas de Talleres de Remedios de Escalada, entre ellos el presunto jefe del grupo, fueron detenidos por la policía bonaerense por los incidentes ocurridos a las puertas del estadio de ese club que derivó en la suspensión del partido ante Defensores de Belgrano.
Las detenciones se llevaron durante allanamientos en la villa 3 de Febrero, cercana a los depósitos ferroviarios de Escalada. Estos procedimientos se realizaron a raíz de los incidentes que se produjeron ayer durante el partido entre Talleres y Defensores de Belgrano, por la octava fecha de la Primera B Metropolitana, en la que 19 policías resultaron heridos y una camioneta fue incendiada.
En los allanamientos llevados a cabo hoy, se secuestró un arma de fuego y se apresó a quien se presume es el jefe de la barrabrava del equipo de Escalada, de apellido Ponce. Además, fueron detenidas otras 9 personas, por lo que sumados a los de ayer, el número de presos por estos hechos asciende a 12. Los procedimientos estuvieron a cargo del personal de la Coordinadora Departamental de Lanús y la Fiscalía interviniente instruye actuaciones por «coacción agravada por el empleo de arma de fuego, lesiones y daños».
El titular de APREVIDE, Juan Manuel Lugones, le adelantó que «Talleres va a pasar un buen tiempo sin jugar en su cancha».
Aparentemente los incidentes se iniciaron, cuando el grueso de la barrabrava quiso ingresar al estadio sin entradas y la policía lo impidió. A partir de ese momento comenzó el feroz enfrentamiento entre los simpatizantes albirrojos y los miembros de la policía bonaerense. Cuando la situación se calmó la calle mostraba los efectos de un campo de batalla, llena de piedras y trozos de mampostería de gran tamaño