
Organizaciones de derechos humanos y barriales denunciaron hoy una «escalada para invisibilizar las luchas populares» en Lanús, al aparecer derribado un muro que contenía un mural con el rostro del testigo desaparecido Jorge Julio López y que iba a ser restaurado por un ataque anterior con manchas de pintura.
El mural ubicado en la plaza Mariano Moreno había sido pintado el 25 de septiembre en homenaje a Jorge Julio López, al cumplirse 10 años de su desaparición, y a la mañana siguiente apareció vandalizado con manchas de pintura.
Distintas organizaciones populares como Vecinos y Vecinas de Remedios de Escalada, Colectivo Unite, Coordinadora Antirrepresiva por los Derechos del Pueblo (Cadep), repudiaron el ataque y convocaron a reparar el mural para el domingo próximo pero ayer encontraron el muro derribado.
«Nos quieren invisibilizar los espacios públicos» denunció en declaraciones a Télam el abogado de Cadep, Sergio Smietnianski, al señalar que «no es un hecho aislado» y que desde la asunción del intendente Néstor Grindetti «se han dañado sistemáticamente murales de militantes populares».
Así, se refirió a las intervenciones que recordaban a Maximiliano Kosteki y Darío Santillán, a Mariano Ferreyra, a Carlos Fuentealba, que reclamaban la libertad de Milagro Sala, y una placa en homenaje a Carlos ‘Petete’ Almirón», una de las víctimas de la represión de 2001, vecino de Lanús.
La intervención en homenaje a López repetía cinco veces el rostro del albañil testigo desaparecido el 18 de septiembre de 2006 con un contorno que paulatinamente se mostraba menos nítido y una leyenda que decía: «acá falta López»