
El acusado del femicidio y ex pareja de la enfermera Yésica Vera (28), quien fue estrangulada en su casa de Guernica, tenía una restricción de acercamiento desde fines del mes de agosto por antecedentes de violencia de género, informaron fuentes policiales y judiciales.
Los informantes señalaron que Víctor Gabriel Rojas (32) fue imputado del «homicidio agravado por el vínculo» de Vera, su ex pareja con quien tenía dos hijos, y resaltaron que si bien ya confesó el hecho ante la Policía, aunque deberá ratificar sus dichos ante la Justicia.
Una fuente policial explicó que el acusado y la víctima se habían separado hacía dos meses y que sobre él pesaba una orden de restricción perimetral, a pesar de lo cual, «la seguía a todos lados».
Esta restricción había surgido a partir de una denuncia que Vera había hecho por golpes y amenazas en la comisaría de la Mujer y la Familia de Guernica contra Rojas, quien mañana será indagado por la fiscal de la causa, Cristina La Rocca, de Presidente Perón.
Al respecto, Rosalía, una prima de la víctima contó esta mañana a Crónica TV que esa golpiza, que no fue la primera, ocurrió a «fines de agosto», cuando él «casi la mata delante de los chicos».
«Utilizaba la técnica de golpes en la cabeza para que no se vieran las heridas», detalló la mujer, que trabajaba en el hospital local, donde la víctima fue a atenderse tras aquel ataque.
Según Rosalía, la perimetral era «por tres meses» y se vencía en estos días, a pesar de lo cual, Vera le permitía entrar a la casa para ver «a los chicos».
«Él prometía que no la iba a agredir más eran amenazas constantes, amenazas psicológicas, una locura. Esto estaba anunciado», relató la prima, quien aclaró que al momento del crimen, los hijos de Vera, un niño de 5 años y una nena de 9, no estaban en la casa y la víctima recién «llegaba de trabajar».
«Él sabía que los chicos estaban en la escuela. Todo fue planificado (…) Primero avisó a sus familiares en Formosa que acababa de matar a su esposa y que se iba a entregar», indicó.
Respecto al móvil del ataque, Rosalía explicó que el acusado «era muy machista, no toleraba la separación ni la denuncia en su contra».
En tanto, los restos de Vera, quien ayer hubiese cumplido 28 años, son velados hasta las 12 en la cochería Rodríguez, de Guernica, y posteriormente serán inhumados en el cementerio de esa localidad.
A su vez, los dos hijos de Vera y el ahora acusado quedaron al cuidado de unos tíos maternos, añadieron los informantes.
El hecho ocurrió el martes a la tarde en la casa donde Vera vivía con sus hijos, situada en la calle 35, entre 7 y 8, de Guernica, donde discutió con su ex pareja.
De acuerdo al jefe policial consultado, el propio Rojas se presentó en la comisaría local y dijo que había matado a su esposa, por lo que los efectivos se trasladaron hasta la vivienda de la mujer donde la hallaron asesinada, tirada en el suelo boca abajo y con signos de asfixia manual.
Ante esta situación, el ex marido de la joven fue detenido en el lugar y puesto a disposición de la fiscal La Rocca.