Los trabajadores de la empresa norteamericana Kimberley Clark ubicada en Bernal fueron desalojados por la Policía bonaerense, luego de que mantuvieran tomada la planta para evitar su cierre.
“A las 3.30 se hizo presente la Policía con un gran operativo. El desalojo se hizo de forma absolutamente ilegal. Fue la única respuesta en estos dos meses de lucha”, denunció a la prensa uno de los despedidos.
Indicó que el desalojo fue “la única respuesta del gobierno” en dos meses de conflicto, y precisó que los representantes sindicales de los trabajadores tuvieron «seis audiencias en el Ministerio de Economía y no tomaron ningún tipo de posición»
El 25 de septiembre, la firma que produce papel higiénico, rollos de cocina y servilletas, cerró la planta ubicada en Bernal, decisión que provocó el rechazo de los trabajadores que resolvieron en una asamblea ocupar la planta para «defender los puestos de trabajo».
La empresa explicó que como parte de su Programa de Reestructuración Global anunciado a principios de 2018, y en respuesta a la necesidad de la compañía de adaptarse a los cambios globales y reenfocar su estrategia a categorías de mayor valor agregado para los consumidores, decidió cerrar la planta.
Y presentó un pedido para la apertura del Procedimiento Preventivo de Crisis (PPC) ante el Ministerio de Trabajo, una herramienta obligatoria cuando se afecta a más del 15% de los trabajadores en empresas de menos de 400 trabajadores; a más del 10% en empresas de entre 400 y 1.000 trabajadores; y a más del 5% en empresas de más de 1.000 trabajadores, y al empresa se e ubica dentro de este último grupo.
Kimberly Clark cuenta con 523 trabajadores en la planta de San Luis; 432 en las oficinas porteñas; 230 en la planta de Pilar; y 214 en Bernal, que permanecen en conflicto.
La planta de Pilar está dedicada principalmente al desarrollo de productos de protección femenina y para adultos, mientras que en San Luis produce pañales para niños y adultos.