La audiencia previa al juicio a nueve ex policías acusados por la denominada «Masacre de Wilde», se realizará el próximo 20 de marzo, luego de que se rechazara un pedido de la defensa para que sea postergada, informaron fuentes judiciales.
La decisión fue tomada por los jueces Jorge Camino, Claudio Fernández y Marcelo Dellature, integrantes del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 3 de Lomas de Zamora, y la audiencia se concretará ese viernes a las 10.
Fuentes judiciales informaron que los magistrados rechazaron el pedido del abogado Roberto Fernández, defensor oficial de los ex policías Osvaldo Lorenzón, Eduardo Gómez y Marciano González, quienes estarán en el banquillo de los acusados junto a Roberto Mantel, Hugo Reyes, Pablo Dudek, Julio Gatto, Marcelo Valenga y Marcos Rodríguez.
Según había planteado el letrado, uno de los motivos que lo llevó a pedir la postergación de la audiencia era que se hizo cargo del caso en diciembre de 2019, cuando estaba preparando otra defensa en otra causa que tenía repercusión pública, y que necesitaba «tiempo» para analizar la «voluminosidad» del expediente y «los innumerables planteos» realizados en el marco de la investigación que ya lleva 26 años.
Sin embargo, el TOC 3 coincidió con el abogado Ciro Annicchiarico, representante de Raquel Gazzanego, la viuda de Edgardo Cicutín, uno de los asesinados junto al remisero Norberto Corbo y sus pasajeros, Claudio Mendoza y Enrique Bielsa, el cual había rechazado un nuevo intento de «dilatación» de la causa.
«Me opongo de manera categórica y contundente a la suspensión peticionada», indicó el letrado ante el Tribunal ya que «volvería a dilatar la marcha de este proceso, ya de por sí dilatado y entorpecido de manera insoportable desde que la Suprema Corte de Justicia de la provincia resolviera el 23 de noviembre de 2013 que debía efectivizarse el juicio por atroces hechos».
Tanto los ex comisarios Roberto Mantel, Hugo Reyes y Eduardo Gómez, como los ex subtenientes Marciano González y Pablo Dudek, y los ex oficiales Julio Gatto y Marcelo Valenga y Osvaldo Lorenzón, llegarán al juicio oral en libertad.
En tanto, el ex cabo Marcos Rodríguez es el único que está preso porque permaneció prófugo 20 años y fue detenido en 2014 en Córdoba.
En el debate, los acusados deberán responder por los delitos de «cuádruple homicidio simple y un homicidio simple en grado de tentativa», ya que una de las víctimas logró sobrevivir.
La «Masacre de Wilde» ocurrió el lunes 10 de enero de 1994, cuando policías de la entonces Brigada de Lanús persiguieron a los ocupantes de dos autos, presuntamente al confundirlos con un grupo de delincuentes que buscaban, y los asesinaron a balazos.
Las víctimas fueron el remisero Corbo y sus pasajeros Mendoza y Bielsa, quienes viajaban a bordo de un Peugeot 505, y el vendedor de libros Cicutín, que se trasladaba en un Dodge 1500, conducido por Claudio Díaz, el único que sobrevivió al ataque.
De acuerdo a los peritajes, ambos vehículos y las víctimas recibieron unos 200 impactos de bala calibre 9 milímetros disparados con pistolas y al menos un subfusil Uzi.
En principio, los once policías que intervinieron en el hecho fueron detenidos, pero luego la Cámara de Apelaciones y Garantías los liberó y finalmente fueron sobreseídos.
Tras apelaciones de familiares de las víctimas, en 2003 y en 2007 volvieron a ser sobreseidos por la misma medida, pero luego la causa siguió su curso hasta la Suprema Corte de Justicia bonaerense, que en 2013 ordenó reabrir el expediente al sostener que «aún cuando se considerase que el cuádruple homicidio investigado no configura un delito de lesa humanidad, es indudable que sí constituyó una gravísima violación de los derechos humanos».