Legisladoras y legisladores nacionales y de la Ciudad de Buenos Aires, firmaron ayer dos proyectos de ley que proponen declarar al Puente Transbordador Nicolás Avellaneda, Patrimonio Histórico y Cultural. El paso volvió a funcionar luego de 60 años sin uso, uniendo Isla Maciel, en el Municipio de Avellaneda, con CABA.
El presidente de ACUMAR, Martín Sabbatella y el intendente de Avellaneda, Jorge Ferraresi, acompañaron a los legisladores Leandro Santoro y Manuel Socías de la Ciudad de Buenos Aires; y a las diputadas Nacionales Paula Penacca, Mónica Macha, Gisela Marziotta y Magdalena Sierra, quienes luego de la firma de los Proyectos hicieron la entrega de las copias a los funcionarios. También entregaron los escritos a Emma Sala, viuda del arquitecto Pasqualini, que fue uno de los principales defensores del puente cuando se intentó su desarme y venta como chatarra en los años ´90.
Los proyectos, que se presentarán en la Legislatura porteña y en el Congreso Nacional, buscan reconocer el valor cultural, comunitario e histórico del transbordador y favorecer su protección. Destacan que sólo quedan ocho puentes de este tipo en todo el mundo y es el único en América del Sur.
