Bajo el lema «No hay un cerebro igual a otro», distintas organizaciones civiles convocan a una barrileteada, con el fin de concientizar a la población sobre la importancia del concepto de «neurodiversidad» en la medicina y la ciencia. Los encuentros serán a las 10:30 en el Paseo la Carbonilla de Remedios de Escalada y a las 15 en el velódromo de Lanús.
El término neurodiversidad nació en los años 90, y fue concebido por los pacientes con autismo para desvincularse, en principio, de los trastornos mentales, señaló un comunicado de los organizadores.
«Esta definición es más amplia aún y aplicable para comprender el por qué no hay un tipo o modelo humano. Con respecto a esto hay una frase que por repetida, quizás no se mida en toda su profundidad: Lo único que nos iguala son nuestras diferencias», afirmó el médico pediatra e infectólogo Rubén Sosa, quien desde hace 35 años utiliza barriletes para concientizar sobre diferentes condiciones.
El médico aseguró que un neurodiverso «no está enfermo, ni está mal, ni es deficiente, sino que es una variedad del cerebro humano que tiene otras fortalezas y otros desafíos. Por esto debemos romper los falsos dilemas de educación integrada o educación especial. Una existencia integrada y de dignidad humana».