El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, pidió hoy que se termine con «la persecución» contra la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner en el marco de la causa por el presunto direccionamiento de la obra pública en Santa Cruz, en tanto el ministro de Desarrollo de la Comunidad bonaerense, Andrés ‘Cuervo’ Larroque planteó a través de las redes sociales que «con Cristina no se jode».
«Basta de persecución. Basta de ‘lawfare’. Todos con Cristina», posteó en las últimas horas el mandatario bonaerense en Twitter, mientras que esta mañana Larroque hizo un reclamo en la misma línea al escribir, también en esa red social: «Con Cristina no se jode».
Además, varios ministros del Gabinete bonaerense pidieron terminar con la «persecución» a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner y al «lawfare» en su contra en la causa por presuntas irregularidades en la obra pública en Santa Cruz, en una jornada en la que está prevista la finalización del alegato de la fiscalía, tras nueve jornadas de exposición.
El gobernador además adjuntó en sus redes sociales el repudio expresado por diputados y senadores del Frente de Todos (FdT) de la provincia de Buenos Aires hacia la «persecución judicial» contra la vicepresidenta, donde señalaron que la causa «Vialidad» es «un episodio más del hostigamiento político, judicial y mediático».
Los bloques se manifestaron en un comunicado compartido en redes sociales en el que dijeron que ese «hostigamiento» se inició «en línea con el calendario electoral en mayo de 2019», en referencia al juicio por el supuesto direccionamiento de la obra pública en Santa Cruz entre los años 2003 y 2015.
Los legisladores señalaron que es parte de «un episodio más del hostigamiento político, judicial y mediático que se lleva adelante de forma coordinada en nuestro país y en Latinoamérica desde el año 2015», y añadieron: «Estas prácticas son un mecanismo de disciplinamiento, estigmatización y control social».
«En el caso de nuestra Vicepresidenta, esta práctica tiene un claro objetivo: proscribirla políticamente», advirtió el texto.
Ese planteo fue compartido en las redes por varios ministros de Kicillof como Javier Rodríquez (Desarrollo Agrario) y Julio Alak (Justicia); así como por el jefe de Asesores, Carlos Bianco.
En ese tono, el jefe de Gabinete bonaerense, Martín Insaurralde, rechazó «la persecución judicial contra Fernández de Kirchner» y consideró que » atenta también contra las reglas claras de nuestra democracia».
Así, ratificó su «solidaridad y acompañamiento a quien le cambió la vida a millones de argentinos y argentinas con sus políticas públicas».
El director de ARBA, Cristian Girard, evaluó que «la persiguen a Cristina, atacan a la democracia»; el titular de la cartera de Salud, Nicolás Kreplak, posteó: «Siempre del lado Cristina de la vida»; y el ministro de Infraestructura, Leonardo Nardini, repudió «la persecución judicial» contra la vicepresidenta que «afecta a las instituciones democráticas» y opinó que «el pueblo no olvida a quien transforma realidades».
En igual sintonía, el ministro de Hábitat, Agustín Simone, expresó: «Frente al ‘lawfare’ y la persecución seguimos acompañando siempre a Cristina Kirchner, porque un pueblo nunca olvida a quien no lo traiciona».
Luego, Pablo López (titular de Hacienda), manifestó: «Estamos con Cristina, del lado de la dignidad de las y los argentinos, y en contra de la persecución política de la que está siendo víctima».
En tanto, la ministra de Gobierno de la provincia de Buenos Aires, Cristina Álvarez Rodríguez, consideró que «la persecución judicial a Cristina Fernández es un ataque a todo el movimiento nacional y popular» y expuso que «buscan proscribirla porque siempre defendió los intereses del pueblo frente al poder real».
«¡Si la tocan a Cristina, nos tocan a todas y a todos!», cerró.