Un suboficial retirado de la Policía de la provincia de Buenos Aires fue asesinado de un balazo en el rostro luego de intentar resistirse a ser asaltado por delincuentes que le robaron el arma reglamentaria, su teléfono celular y la billetera en Esteban Echeverría, informaron hoy fuentes judiciales y policiales.
El hecho se registró ayer alrededor de las 14 en la esquina de las calles General Lavalle y Villarino, en la zona rural de dicha localidad.
Voceros judiciales y policiales informaron a Télam que un suboficial retirado de la Policía bonaerense, al que identificaron como Alfredo Loreiro (71) había estacionado en ese cruce su automóvil Chevrolet Meriva, en el que se trasladaba junto a su esposa.
En esas circunstancias, fueron sorprendidos por tres asaltantes armados que descendieron de una camioneta Renault Kangoo blanca y que intimidaron al matrimonio con fines de robo.
A raíz de ello, Loreiro se resistió al asalto, se identificó como policía y extrajo su arma reglamentaria, tras lo cual se trabó en lucha con los ladrones.
Las fuentes informaron que, en ese marco, uno de los delincuentes le efectuó un disparo Loreiro, que impactó en el pómulo de la víctima, a la altura del ojo izquierdo.
El expolicía cayó al suelo gravemente herido, mientras que los asaltantes le sustrajeron el arma reglamentaria calibre 9 milímetros, la billetera y el teléfono celular, tras lo cual se fugaron del hecho lugar.
La esposa de la víctima se comunicó de inmediato al 911 y al lugar acudieron efectivos de la comisaría 1ra. de Monte Grande, quienes solicitaron una ambulancia en la que el hombre fue trasladado a un hospital cercano.
Finalmente, Loreiro falleció el centro de salud a raíz de la gravedad de la herida de bala en el rostro, añadieron las fuentes consultadas.
Interviene en la causa el fiscal Andrés Devoto, cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1 descentralizada de Esteban Echeverría, quien dispuso la presencia de la Policía Científica en la escena del crimen para llevar a cabo las pericias de rigor.
A su vez, los detectives de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de Lomas de Zamora se encontraban abocados a la identificación de los homicidas.