El titular de la UFI Nº 9 de Lomas de Zamora especializada en Violencia de Género y Familiar, Sebastián Bisquert, solicitó la elevación a juicio de la causa que se le sigue al ginecólogo Diego Javier Clementi, por 14 hechos de abuso sexual cometidos en su propio consultorio y en perjuicio de mujeres que habían acudido para una consulta médica.
El hombre se encuentra en libertad dado que no prosperó el pedido de prisión preventiva solicitada por el mismo fiscal en mayo pasado, pero se le prohibió al imputado atender pacientes durante 90 días.
En el hospital Evita de Lanús, donde Clementi era jefe de servicio, en cambio, fue desvinculado preventivamente de la atención a pacientes «hasta que la Justicia determine su responsabilidad en los casos denunciados», indicaron desde ese centro sanitario.
Habiendo transcurrido ese lapso, la Agencia Nacional de Noticias comprobó que el especialista volvió a atender en su clínica Centro Médico de la Mujer de Burzaco dado que el servicio de turnos online que ofrece página web de este centro médico -de su propiedad- otorga turnos únicamente para Clementi en una amplia variedad de horarios para el día de mañana y subsiguientes.
Según el pedido de elevación a juicio de la causa en Nº 07-00-009312-17/00 con fecha 10 de agosto al que tuvo acceso hoy esta agencia, al representante del Ministerio Público Fiscal (MPF) las pruebas recolectadas le permiten «afirmar que tanto la materialidad de los hechos como la autoría penalmente responsable del imputado respecto de aquellos se encuentran debidamente acreditados, con la certeza que este estadío procesal requiere».
Concretamente, solicitó que Clementi sea juzgado por los delitos de «abuso sexual con acceso carnal cometido en forma reiteradas (Hechos N° 1, 2, 3, 4, 5) en concurso real con el delito de abuso sexual gravemente ultrajante con acceso carnal (hecho N° 10 y 11), que a su vez concurren materialmente con los delitos de abuso sexual gravemente ultrajante (Hechos N° 6, 7, 8, 9, 12 y 14) y con el delito de abuso sexual simple (Hecho N° 13)».
De la descripción de los hechos surge que éstos fueron denunciados como cometidos entre 2017 y 2022 en perjuicio de 14 mujeres mayores de edad, y de los relatos emerge una mecánica repetida: las víctimas aseguran que, aprovechándose de la situación de poder que implica su condición de médico, Clementi las besó cerca de la boca, las hizo desvestirse enfrente de él, las manoseó en sus partes íntimas sin ninguna justificación terapéutica, les apoyó su miembro y hasta les introdujo sus dedos en la vagina.
En tanto, el descargo de Clementi «no llega ni por asomo a conmover el sólido plexo probatorio que se erige en su contra y que en forma palmaria acredita la materialidad de los hechos enrostrados y la responsabilidad criminal que le cabe en orden a los mismos».
«En su relato se ha limitado a explicar la actuación profesional que corresponde para el tratamiento de distintas afecciones, pero de modo alguno ha dado respuestas que emitan desmentir las afirmaciones de las denunciantes», dijo.
El ginecólogo también se exculpó diciendo «que la percepción de las pacientes es subjetiva» pero -sin embargo- de los testimonios de las víctimas «no observamos un hecho aislado, que puede atribuirse a una mala percepción», argumentó el fiscal.
Clementi es director médico del Centro Médico de la Mujer de Burzaco y mantiene activa su matrícula otorgada por el Colegio Médico de la provincia de Buenos Aires distrito II, que no respondió a las reiteradas requisitorias de esta agencia.