El intendente de Avellaneda, Jorge Ferraresi, y el exintendente de Lanús y Jefe de Gabinete del Gobierno de la Ciudad, Néstor Gridetti, mantuvieron una reunión de trabajo para tratar «la integración metropolitana y la unificación del desarrollo urbano sobre ambos márgenes del Riachuelo», según señaló el jefe comunal a través de sus redes sociales.
Por su parte, el funcionario porteño comentó que el encuentro se realizó «para diagramar una agenda de trabajo conjunta sobre la integración y colaboración entre ambas ciudades. Además, conversamos sobre la unificación del desarrollo urbano sobre ambos márgenes del Riachuelo, río que marca el límite entre nuestra Ciudad y el municipio vecino».
El encuentro, el segundo desde el pasado 10 de diciembre, es mirado con atención desde Lanús, en medio de tensiones entre el intendente de Avellaneda y Julián Álvarez. En las últimas semanas, se concretó el desembarco de Álvarez en el estratégico órgano que conduce el Puerto de Dock Sud, dónde buscará fondos para compensar la ausencia de fondos nacionales para obras. Por otra parte, esta semana se anunció que vecinos de Lanús recibirán ayuda alimentaria por parte de la administración Ferraresi, un gesto que no fue bien recibido en el palacio municipal de Hipólito Yrigoyen.
Por detrás está el posicionamiento bien diferenciado entre ambos jefes comunales. Mientras Álvarez sostiene la conducción de Cristina y Máximo Kirchner como estandarte, Ferraresi ha comenzado a construir en el sector de Axel Kicillof. En un juego en el que cada gesto es interpretado y reinterpretado, la foto del intendente de Avellaneda con Grindetti prende luces en el tablero del otro lado de la frontera de los municipios.