Luego de casi ocho años, la interna oficialista de Lanús vuelve a subir de volumen. Ese es el tiempo que separa al kirchnerismo local de aquella guerra que significó el cierre del ciclo Quindimil y el ascenso de Díaz Pérez. Esta semana fue el propio intendente el que salió a cruzar a su contrincante acusándolo de falsear la verdad y de gastos elevados en la campaña. La militancia y los medios se aprestan para largos rounds a la espera de las PASO.
«La sangre llegó al río» fue el comentario más escuchado por estos días en las esferas de poder lanusense luego de que las declaraciones de Darío Díaz Pérez criticando abiertamente a Julián Álvarez llegaran a las páginas de Clarín.
En una entrevista al portal colega Lanús Noticias, el jefe Comunal no había dudado en disparar: “La verdad que se está llevando una práctica política en Lanús que ni yo ni los militantes nunca habíamos visto. Primero, muchísimo dinero en gastos de publicidad; segundo, un sistema para armar mentiras y a partir de la mentira tratar de construir una verdad política”.
En esa misma nota, Díaz Pérez dice que Julián Álvarez casi no mide en las encuestas que el posee, pero – contradictoriamente- prefiere apuntar contra el viceministro de Justicia y no contra sus rivales en una hipotética elección general, es decir contra los candidatos del PRO y del Massismo.
En ese sentido, cabe destacar que todas las encuestas dadas a conocer por los políticos lanusenses (salvo la publicitada por el intendente) marcan el crecimiento de Álvarez.
Apenas unos días después, el Intendente dialogó con APLanús y midió cada una de sus palabras para referirse a la interna y reconoció que la presidenta Cristina Fernández será, a fin de cuentas, la gran electora de la interna K.
La disputa ya llegó a los medios y una pregunta que se realizaban muchos es quien pagará el costo político por haber nacionalizado la interna de forma virulenta (de forma orquestada o no) a través de Clarín.
La militancia kirchnerista no es ajena al combate: Según confirmaron dirigentes de las principales agrupaciones, la mayoría «ya decidió con quién jugarán». Mientras el Movimiento Evita intenta sostener a Mabel Gagino, La Cámpora jugará al 100 por ciento con Álvarez, y Raíz Social con Darío. Queda aun por definir cual será la posición de la influyente Juventud Peronista.
La puja de poder planteada comenzó a verse también en las calles, con la superposición de afiches entre los propios candidatos K, una práctica que es vista con malos ojos por quienes tienen años en la política del conurbano.
A meses de las PASO, el intendente sostienes que «las cartas están echadas». Habrá que esperar entonces para saber quien tiene el «ancho» de espadas que le permita superar esta ronda y sentarse en la mesa de las Elecciones Generales para enfrentar al PRO y al massismo.