Peñarol se vengó de Lanús en un partido caliente

Peñarol derrotó como visitante 71 a 64 a Lanús y a partir de este triunfo, válido por la octava fecha, el elenco de Sergio Hernández continúa en la cima de la zona Sur de la Liga Nacional. En tanto el Granate podrá erigirse en el único escolta si vence a Boca Juniors, en un cotejo reprogramado de la tercera jornada, que se disputará el martes a las 21. El trámite de juego se caracterizó por la paridad, así como por la energía, dramatismo y fricción. 

El dominio de las acciones fue repartido, en ningún momento ninguno de los contendientes se escapó en el tanteador y generaron un desenlace apasionante. La clave del visitante para alzarse con la victoria se basó en la oportuna efectividad en triples en el último capítulo y en el mayor aprovechamiento de los tiros libres. Asimismo, el local padeció de bajos porcentajes en las bombas externas desde los 6,75 metros (20) y en la línea (54). Además, el equipo de Silvio Santander sufrió la mala noticia de la lesión del pivote Terrel Taylor, quien recibió un fuerte golpe en su mano derecha, que podría tratarse de una fisura o fractura del cuarto metacarpiano. 

El máximo anotador de la noche fue el escolta norteamericano Kyle Lamonte con 16 puntos (6/14 en dobles y 8 rebotes), bien secundado por Alejandro Diez con 12 unidades (4/7 en triples) y Marcos Mata con 11 tantos (3/4 en triples). Por el rincón de Lanús, se destacaron el ala pivote Fernando Calvi y Terrel Taylor con 13 puntos. Ante una multitud que colmó el microestadio Antonio Rotilli, el choque arrancó con efusividad, ambos equipos trabajaron sus avances y desplegaron una buena prestación defensiva, lo que provocó una paridad en el tablero de 9-9, a los 5 minutos. Luego llegó un lapso fructífero del local, que de la mano del poder anotador de Taylor (9), quien cargó de tres faltas a Leiva, y el desparpajo de Laprovittola (5) sacó la máxima 18-12. No obstante, los marplatenses recuperaron terreno para que el primer cuarto se clausure con Lanús arriba 19-17. 

En el segundo capítulo, el local apeló a la rotación para continuar con la concentración en defensa, así como los ingresos de Byró (4) y Calvi (4) le permitieron despegarse 25-19 a los tres minutos. El juego ya se había teñido con la agresividad y roces en los marcajes, cuando despertó la capacidad goleadora de Lamonte (8), quien lastimó con sus penetraciones, y los triples de Mata (6). Además, el visitante implementó una zona flexible 3-2, que complicó en demasía las construcciones y el acceso al canasto de Lanús, así como lo hundió en una anemia ofensiva. A partir de estos atributos Peñarol accedió al entretiempo ganando 34-33. 

Tras las charlas en vestuarios, el conjunto de Sergio Hernández impuso condiciones, congestionó su zona en defensa, aprovechando que el local mandó una formación liviana a la cancha y gozó de un pasaje productivo de Lamonte (6), más algunas bombas de Mata y Rodríguez. Con estos atributos el visitante clavó un parcial 12-3, que le concedió la máxima 44-36, a los cuatro minutos. Mientras, los de Santander desperdiciaron opciones desde la línea de libres, pero reaccionaron con un encendido Byró (6) para acechar 41-44. En ese contexto dinámico y cambiante, los marplatenses volvieron a distanciarse 53-44, pero un parcial 6-0 de Lanús generó el acercamiento en el cierre del cuarto 50-53.

En el cuarto final Lanús empezó compenetrado, desplegando su mejor momento defensivo y encontrando soluciones en ataque con Fernández (6) y Calvi (6), así logró revertir el tanteador y pasar al frente 60-57. No obstante, los visitantes ajustaron su sincronización defensiva y disfrutaron del destape de Diez, quien metió tres triples consecutivos, para estampar un pasaje 12-2, que lo mando adelante 69-62. El Granate ya no halló variantes, siguió sufriendo la mala noche en triples y libres y terminó cayendo 71 a 64.