La pandemia de la Covid-19 ha afectado a los distintos sectores de la economía mexicana, entre ellos, al mercado inmobiliario que tuvo una caída histórica en marzo de 2020. Sin embargo, desde el Banco de México y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público han pronosticado para este año una suba de casi cinco puntos porcentuales del Producto Bruto Interno para este sector.
Una de las acciones que se han tomado en pos de fomentar la actividad en este rubro fue la de reducir las tasas de interés hipotecarias y mantenerlas fijas hasta el final del crédito. Esta medida no sólo brinda tranquilidad a quien toma un préstamo, sino también la seguridad de que el monto a pagar no se verá influenciado por posibles vaivenes económicos.
La pandemia también impuso nuevas modalidades de trabajo, a través del homeoffice, y de estudiar, mediante las clases virtuales. Esto ha provocado que varias familias optaran por comprar o rentar una propiedad de mayor superficie o con más cantidad de habitaciones, con el objetivo de poder llevar adelante sus actividades laborales y académicas de manera cómoda y efectiva.
En esa línea, muchos optaron por trasladarse a otras ciudades o estados al no tener la obligación de permanecer en un determinado espacio físico para cumplir con la jornada laboral. De esta manera, las personas pueden trabajar con una simple conexión wifi en un ambiente más ameno, cerca de la playa o rodeados de paisajes increíbles.
Sin embargo, hay otra realidad. Y es la que incluye a muchos otros que han tenido que reducir gastos o dejar sus viviendas por no poder abonar la renta, ya que los precios no se han readecuado a la nueva realidad económica. Si bien, algunas empresas privadas aseguran que las búsquedas de propiedades han crecido un nueve por ciento durante este año, esa cifra no se vio traducida en las adquisiciones.
Cualquiera sea el panorama, el mercado inmobiliario requiere de una renovación que permita a las personas poder conocer las propiedades sin necesidad de trasladarse y con un solo click. Es por eso que los sitios o plataformas donde se ofertan las casas o departamentos para la venta o renta deben estar bien completos y no omitir ninguna información.
Por ejemplo, agregar recorridos 3D es una buena opción, porque ayuda al consumidor a tener una noción más acabada de la vivienda. También las fotos deben ser claras, nítidas y contemplar todos los ambientes, especialmente aquellos que tengan que ver con espacios abiertos o pulmones.
Las descripciones son otro punto a considerar. Si el usuario no cuenta con todos los datos (superficie construida y del terreno, cantidad de recámaras, cuartos de baño, etc.) le será muy difícil decidirse por una determinada oferta. Además, pueden incluirse datos adicionales sobre líneas de subtes o micros que pasan cerca, distancia hasta los centros comerciales o si existen atracciones turísticas que no pueden dejar de ser visitadas. Por último, es vital agregar el precio, un mapa con la ubicación y todas las formas de contacto.