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Detienen a un joven por la desaparición de un abogado en Quilmes

Un hombre que tenía en su poder el teléfono celular de Salvador Altamura, el abogado desaparecido hace 17 días en Quilmes, fue detenido en las últimas horas, mientras que los investigadores siguen una pista para localizar la moto del letrado en el barrio porteño de San Telmo, informaron hoy fuentes policiales y judiciales.

«Hay un sospechoso detenido. Se trata de un joven de 24 años que tenía el celular de Salvador y ahora tendrá que dar explicaciones para ver si está involucrado en su desaparición», dijo a Télam la abogada Solange Alonso Barnetche, quien representa a la familia de Altamura.

La letrada explicó que la detención fue concretada «entre Berazategui y Quilmes» por detectives de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de Quilmes, quienes ya venían rastreando ese celular desde que en los últimos días «tuvo cierta actividad cuando se encendió en la zona del Parque Pereyra Iraola».

«Este hombre tendrá que explicar qué hacía con el teléfono de Salvador, cómo lo obtuvo, si se lo vendieron. No creemos que lo haya encontrado», comentó la abogada.

Alonso Barnetche también informó que ayer surgió una nueva pista en el expediente para localizar la moto Honda CRF 250 roja y blanca, patente 942 LDP, con la que desapareció y quedó filmado el abogado.

«Se está haciendo un rastrillaje por el barrio de San Telmo, cerca de la autopista 25 de Mayo, y por la zona de la Isla Maciel porque alguien llamó para contar que estaban ofreciendo una moto de similares características a muy bajo precio y sospechamos que sea la de Salvador», afirmó la abogada.

Sería la segunda vez que visualizan la moto que aún no pudo ser secuestrada, ya que al inicio de la investigación, la Honda apareció abandonada y con la llave colocada en uno de los accesos de la villa Itatí de Quilmes, algo que llamó la atención de un vecino que le sacó una foto y la subió a redes sociales.

Pero cuando la Policía la fue a secuestrar, ya la habían robado y luego se pudo determinar que había sido usada el jueves 16 de este mes por dos motochorros que rompieron la ventanilla de un auto para robar un bolso en un hecho ocurrido en el centro del Quilmes.
Sobre la principal hipótesis que maneja la familia, Alonso Barnetche afirmó que ellos creen que se trató de «un secuestro, de alguien que retuvo a Salvador para ir a su casa y robar un dinero» y que esperan que pronto «aparezca con vida».

«Sabemos que le robaron un dinero en dólares que nadie sabe con precisión cuánto es pero sí que era una suma importante que desapareció de la caja fuerte de su departamento», indicó la abogada.

La letrada contó que pidió en el expediente, dirigido por el fiscal Ariel Rivas, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1 de Quilmes, que se realice un allanamiento o inspección ocular en el departamento de Altamura, ya que, según dijo, «desde que se denunció la desaparición, nunca fue la Policía Científica a levantar huellas ni otros rastros».

Mañana, a las 11, la familia Altamura convocó a una marcha frente a los tribunales de Quilmes, ubicados sobre la avenida Hipólito Yrigoyen al 400 y Videla, para exigir por su «aparición con vida», según anunciaron en redes sociales.

Salvador Altamura (48), era abogado pero no ejercía la profesión, y en la actualidad corría en forma amateur carreras de motociclismo, había vendido una empresa de polietileno y polipropileno, y actualmente continuaba con la importación de las materias primas para ese rubro industrial.

El último rastro que se tiene de Altamura es un video de una cámara de seguridad que lo captó el lunes 13 de julio a las 18.06, cuando pasaba con su moto por el frente de su edificio de la calle 25 de mayo al 200, de Quilmes.

Según lo que puede verse en las imágenes, a Altamura se lo ve llegar circulando, aminora la marcha y luego acelera y sigue de largo.

Alrededor de las 4.30 de la madrugada del martes 14, las cámaras del edificio de Altamura captaron la imagen de la llegada de la moto Honda CRF 250 roja y blanca del abogado pero montada por otro hombre de distinta contextura física, ya que el abogado mide 1,90 metros y el que llegó en su moto era más bajo y más robusto, aunque usaba el mismo casco.
Según denuncia la familia, esa persona permaneció cerca de una hora y media en el edificio y luego se retiró.

     

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