Tras varias amenazas de bombas ocurridas en distintas escuelas de Lanús durante el mes de agosto, se llevaron adelante cinco allanamientos en los que se identificaron a los involucrados, quienes serían todos menores de edad.
Los procedimientos se dieron a partir de un trabajo conjunto entre las Secretarías de Seguridad y Educación del municipio, la Dirección de Escuela de la provincia de Buenos Aires, y las Fiscalías 6 y 7 de Lanús, en pos de agilizar las causas penales y aportar las pruebas necesarias.
Las amenazas se dieron por medio de llamados anónimos al 911, por lo que se pudo determinar el origen de las mismas. Así se llegó a los allanamientos, donde se incautaron teléfonos celulares.
La Justicia ahora intenta determinar si los menores actuaron solos o hubo adultos involucrados.