
Hugo Armando Barroca (37) y Sergio Miguel Bigón (35) comenzaron a ser juzgados ayer por la violación de una joven en 2013 en Quilmes, tras haber concurrido a un boliche. Ambos hombres negaron haber cometido el hecho, pero la víctima declaró y los acusó de haberle suministrado alcohol y haber abusado de ella.
Los imputados declararon ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 1 del mencionado distrito que los juzga por «abuso sexual con acceso carnal» y negaron haber cometido el hecho.
Fuentes judiciales informaron que la víctima dio su testimonio esta mañana y tras responder las preguntas de la fiscal Mariel Calviño y los defensores, señaló a ambos como los autores de la violación.
La joven que por entonces tenía 18 años dijo que el 2 de junio de 2013 estaba junto a dos amigas que también declararon ayer y cerca de la 1.30 fueron a un bar de la zona de Quilmes.
Según las fuentes, uno de los acusados le avisó a la chica, a la que había conocido dos meses antes, que estaba en el boliche Buró, ubicado en Leandro N. Alem entre Lavalle y Almirante Brown, en pleno centro comercial quilmeño.
Las tres chicas fueron a ese lugar cerca de las 2 y se encontraron con los imputados, tras lo cual tomaron dos botellas de champán y, luego, tres vasos con vino espumante.
De acuerdo a la declaración de la víctima, los imputados no ingirieron esa bebida y cerca de las 4 sus dos amigas se retiraron del boliche y se dirigieron a otro bar, mientras que ella se quedó con los jóvenes.
Las amigas contaron ayer en el juicio oral a los jueces Fernando Celesia, María Cecilia Maffei y Marcela Vissio que, al salir, comenzaron a sentirse muy mal y que por la cantidad de alcohol que tomaron eso no debió haber ocurrido.
Al respecto, la denunciante también dijo que comenzó a sentirse mal y adormecida, por lo que su cuerpo no le respondía y sus ojos se le cerraban.
La víctima fue a un baño y vomitó durante unos 15 minutos hasta que personal de limpieza y seguridad la llevó a la terraza para que tomara aire.
En sus testimonios, las tres chicas refirieron que nunca se sintieron tan mal por haber tomado alcohol y que notaron efectos muy diferentes a la ingesta de ese tipo de bebidas, por lo que supone que podrían haber sido drogadas con algún tóxico.
Tras esa situación, los hombres la llevaron al departamento de uno de ellos, ubicado en Almirante Brown al 400 de Quilmes, donde abusaron sexualmente de ella.
Cuando logró salir del departamento, la joven fue auxiliada por un amigo que alertó sobre lo ocurrido a la policía y un patrullero la llevó a la comisaría 1era. de Quimes para realizar la denuncia correspondiente.
Por su parte, los acusados no recordaron el momento de haberles comprado la bebida espumante y reconocieron haber estado con las tres amigas en el boliche, donde tomaron dos botellas de champaña.
Además, uno de ellos aseguró que se quedó con la chica en la habitación y el otro se quedó en la cocina preparando café, aunque ambos negaron haberla violado.
El Tribunal pasó a un cuarto intermedio para mañana a las 12 cuando la fiscal Calviño y los abogados defensores den a conocer sus respectivos alegatos.