
Un proyecto de ley presentado en la Legislatura bonaerense busca prohibir la actividad de los denominados «cuidacoches» y «limpiavidrios» sin autorización en la provincia de Buenos Aires, y prevé multas y arresto para quienes realicen ese tipo de actividades.
La iniciativa presentada por los legisladores modifica el Código de Contravenciones provincial para sancionar ese tipo de actividades.
A partir de la modificación, los infractores podrían ser sancionados con multas de entre 200 y 1.000 pesos. O con 2 a 10 días de arresto por estar en la vía pública ofreciendo estos servicios. Estas penas se podrían agravar si quien está en falta «portare armas no convencionales», como elementos contundentes o similares que sirvan para quebrar alguna voluntad rígida
«Estas personas asumen una actitud de coerción o de imposición a los propietarios», evaluó Castello.
El proyecto define a los cuidacoches o trapitos como las «personas que ofrecen voluntariamente y sin guardar relación alguna con la administración pública, servicio de estacionamiento o cuidado de vehículos que se estacionan a cambio de una retribución voluntaria de quien recibe el servicio».
Además, establece que los limpiavidrios son aquellos que «ofrecen voluntariamente y sin autorización la limpieza de vidrios de cualquier tipo de automotor en la vía pública, ya sea en forma onerosa o gratuita”.
Castello consideró que es necesario “terminar con esta actividad de quienes se apropian del espacio público extorsionando y apretando a los ciudadanos».
«Muchas veces, detrás de los cuidacoches, hay mafias que se han organizado para dividirse la ciudad como si fuera un botín, en perjuicio de los vecinos», concluyó Castello.