El Papa Francisco designó al presbítero Jorge Ignacio García Cuerva como Obispo auxiliar de la diócesis de Lomas de Zamora. “Es muy emocionante lo que me está pasando, gracias a la diócesis de Lomas de Zamora que me recibe, me confío a sus oraciones, voy a aprender a ser pastor junto con ellos”, aseguró García Cuerva.
“Mi sacerdocio ha sido siempre en comunidades muy pobres, en villas de la diócesis de San Isidro, entonces quiero poder ser un pastor del Pueblo de Dios, especialmente entre los más pobres”, señaló a Eclesia.
“Quiero aprender de los dos obispos con los que voy a compartir la pastoral y la vida, de monseñor Lugones y monseñor Torres Carbonell, y ser, como siempre pedí, un sacerdote feliz, quiero poder ser un obispo feliz, para poder transmitir con fuerza la alegría del evangelio en esta Iglesia en salida, en esta Iglesia que se juega, que es lo que nos pide el papa Francisco”, deseó el sacerdote de 49 años que proviene de la diócesis de San Isidro.
La designación del Papa “es la posibilidad de sumarme a una Iglesia abierta, misionera, samaritana y cercana a los más pobres, que quiere abrazar fuerte la cruz de Jesús en los crucificados de hoy y que sé que en la diócesis de Lomas esto está pasando; me entusiasma mucho poder sumarme a esa Iglesia cercana con los más pobres como protagonistas”.
“Hoy a la mañana, un chico que pudo salir de la droga, del mundo del delito, me abrazó y mirándome a los ojos me dijo `que nunca me olvide de los más pobres´. Ese tiene que ser el eje de mi ministerio pastoral en la diócesis de Lomas. Fue algo que me conmovió mucho y es como que Jesús me lo decía a través de este muchacho”, finalizó.