
Elbio Oscar Fernández, conocido como “El Rey del Corte” por sus antecedentes como reducidor de vehículos, fue detenido nuevamente a bordo de un auto robado y, tras allanar su casa, la Policía secuestró gran cantidad de autopartes y documentación falsa.
Fuentes judiciales y policiales informaron hoy que, en su declaración indagatoria, Fernández (50) dijo que era “víctima de una persecución policial y judicial” y responsabilizó a su hijo de 17 años por la posesión del auto robado.
La detención de “El Rey del Corte”, si bien trascendió hoy, fue concretada el miércoles último por efectivos de la comisaría 5ta. de Avellaneda, en un domicilio de la calle Víctor Hugo 1455 de Wilde, en la zona sur del conurbano.
Según los voceros, la Policía montó una vigilancia encubierta en la vivienda porque una empresa de rastreo satelital había denunciado que en esa casa se estaba “enfriando” -como se dice en la jerga-, un Renault Fluence blanco que había sido robado horas antes en el partido bonaerense de Pilar por dos delincuentes armados que le cruzaron una moto al conductor.
Cuando los efectivos vieron que ese auto salía del garaje del domicilio de Fernández, lo interceptaron y detuvieron al conductor que, de acuerdo a las fuentes policiales, era el dueño de casa y que les ofreció 200.000 pesos para dejarlo libre, precisaron los informantes.
El acta de detención indicó que el hijo de 17 años del imputado primero salió de la propiedad con un auto marca Alfa Romeo y, detrás de él, lo hizo su padre con el Fluence robado.
Sin embargo, fuentes judiciales revelaron a Télam que en su indagatoria ante el fiscal Elbio Laborde, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 3 de Avellaneda, “El Rey del Corte” acusó al funcionario judicial y a los policías de “armar una nueva causa” y delató a su propio hijo adolescente de ser el que estaba al volante del auto con pedido de secuestro.
Tras su descargo, Fernández permanecía esta tarde detenido e imputado de “encubrimiento doblemente agravado por la habitualidad y el ánimo de lucro”, un delito que prevé una pena de uno a seis años de prisión.
A su vez, el fiscal Laborde ordenó allanar la propiedad de la calle Víctor Hugo, donde la Policía secuestró, además del Renault Fluence robado, otros cuatro autos, de los cuales un Renault 12 y un Fiat Duna presentaban las numeraciones de motor y chasis suprimidas.
Además, fue hallada una gran cantidad de llaves, chapas patente apócrifas, siete equipos Nextel, ocho estéreos, autopartes, anotaciones manuscritas con pedidos de algunos de esos repuestos y alrededor de 70 sobres con documentación de vehículos.
Los investigadores determinaron que la metodología utilizada allí para realizar los pedidos era por carta y, en ese sentido, se descubrió en el buzón del inmueble notas con inscripciones tales como “Buscar autos: Transit en La Matanza; BMW en Monte Chingolo” o “Preciso, inyector de Passat y Trafic”.
Otra de las maniobras empleada era la de vender autos “melizos”, es decir, que compraba vehículos viejos en los remates y utilizaba sus patentes y papeles para los robados, al tiempo que a las autopartes sustraídas les hacía un nuevo registro de pieza.
A raíz de la gran cantidad de repuestos y documentación incautada, el fiscal Laborde solicitó la presencia de inspectores de la Planta Verificadora de Quilmes y desde el jueves pasado hasta hoy continuaban con el allanamiento en la vivienda.
Fernández fue bautizado como “El Rey del Corte” por ser el líder de una de las redes más grandes de desarmaderos de autos de la zona sur del conurbano y presenta en su prontuario dos condenas de la justicia de Lomas de Zamora, una por encubrimiento y otra por asociación ilícita.
La última condena se le aplicó el 29 de diciembre de 2011 cuando el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 10 de Lomas de Zamora lo sentenció a siete años y medio como jefe de la asociación ilícita dedicada al desguace de autos y le aplicó una prohibición de 10 años para comercializar autopartes.
Como por esa causa ya llevaba casi seis años con prisión domiciliaria, “El Rey del Corte” no terminó en la cárcel y a los pocos meses quedó con la pena cumplida.
En ese juicio, Fernández también dijo ser “inocente” y que había quedado demostrado que “la prueba fue plantada por la Policía” debido a que se negó “a pagar una coima”.
Los pesquisas estiman que la banda del “Rey del Corte” funcionaba en los partidos de Avellaneda, Quilmes, Berazategui, Lanús y La Plata desde aproximadamente 1995.
A raíz de las actividades ilegales, Fernández había sido denunciado en 2002 y 2005, y detenido en varias ocasiones, dos de ellas en enero y junio de 2010 pero en octubre de ese mismo año volvió a ser excarcelado por irregularidades en el procedimiento.
Los investigadores de la Policía bonaerense contaron que en aquellos años Fernández se jactaba ante sus amigos y conocidos que no tardaba “más de treinta o cuarenta minutos en desarmar un auto” para luego vender sus autopartes