Luego de que en las últimas horas se conociera la salida del intendente de Lanús, Néstor Grindetti, de la mesa provincial del Juntos por el Cambio, las partes involucradas salieron a aclarar que la relación no está rota sino que se dio por diferencias en torno a temas puntuales de gestión.
Grindetti, la cabeza visible de la agrupación «Hacemos» y, en la práctica, uno de los referentes territoriales más importantes de la tercera sección electoral, encabezó gestiones con el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires en torno a la modificación de una ley que, durante la gobernación de María Eugenia Vidal, modificó el régimen jubilatorio de los trabajadores del Banco Provincia.
Esa negociación avanzó pero, a la hora de ser revisada por las cúpulas del partido, fue rechazada.
Fuentes cercanas a la intendencia de Lanús comentaban hoy que la diferencia fue de tono operativo, pero aclararon que, de ninguna manera se puede hablar de mal clima o mala relación entre Grindetti y Macri.